Leche de Quinua o quinoa casera.

Continuando con los post de leches vegetales para intolerantes a la lactosa...Os dejo una receta de leche de quinua, muy utilizada en los países andinos ya que proporciona todos los aminoácidos esenciales.

La leche de quinua es muy alcalina y tiene un sabor agradable a cereal. Además, es muy fácil de hacer y podéis tenerla en la nevera durante unos 3 días.

 Ideal para preparar cremas bechamel, base de muchas recetas, entre ellas podéis iniciaros con unas ricas croquetas.

                                                        ¿Os atrevéis a darle un sorbo?

INGREDIENTES:

8 cucharadas de quinua en grano

1 litro de agua

1 ramita muy pequeña de canela o 1 pizca de canela en polvo

1 cucharadita de stevia, azúcar o miel (a vuestra elección)

1 trocito de cascara o piel de limón  (optativo)

Se lava la quinua en un colador con agua fría, se deja remojar el grano al menos 3 horas. Podéis dejarla por la noche y hacerlo por la mañana.

Se lleva a hervir y se cocina a fuego mínimo unos 10 minutos junto la canela y la piel de limón. Hasta que la quinoa se haya abierto y veamos que la quinoa ha doblado su tamaño, liberando su germen blanco (o sea, un rabito blanco como un hilo). Se cuela con un colador de tela, con un pañuelo de hilo o con el colador que tengáis por casa, se añade el azúcar y lista.

El azúcar, la miel o stevia los podéis añadir cuando la quinua está cociendo, pero recordad que no debéis endulzar luego las bebidas que os preparéis!!

Una vez tengáis preparada la leche vegetal podéis añadirle café, chocolate o lo que más os guste. Incluso podéis arriesgaros con alguna fruta y preparar algún batido!!