Aunque,
bien es cierto que el otoño no suele gustar a muchos, por mi parte, debo decir que no
me desgrada. Pues te advierte de cómo será el invierno y todavía puedes
disfrutar de días soleados. Además, nos deleitan con hermosos colores
rojizos, marrones y amarillos, creando paisajes maravillosos. ¿No os parece?
De cada estación me gusta un producto y del otoño me encantan las espinacas, versátiles, fáciles de comer frescas o cocidas, tienen un color verde intenso muy bonito que resalta cualquier plato y nos aportan ácido fólico.
Por eso, hoy os dejo una ensalada con productos de temporada y otros que ya la han casi cerrado, pues cogí los últimos rabanitos del super!
2 tomates
10 rabanitos (los podéis cambiar por cualquier rábano de temporada)
2 zanahorias
1 taza de mijo
1 pepino mediano
15 hojas de espinacas (un manojo pequeño)
1 pizca de cúrcuma fresca rallada
1 pizca de gengibre fresco rallado
1 cucharada sopera de lino
1 cucharada sopera de sésamo
1 pizca de sal
1 pizca de pimienta negra
1 chorrito de aceite de oliva
1 chorrito de limón
Se prepara el mijo: Cocer el mijo a fuego medio durante 13-15 minutos (dependerá también del tiempo y agua que ponga en el embalaje), añadiéndole 2 1/2 veces su volúmen en agua y una pizca de sal. Ojo, puede pegarse fácilmente a la olla o al cazo, así que os aconsejo que no le quitéis el ojo y remováis de vez en cuando.
Se lavan bien las verduras (tomates, zanahoria, espinacas, pepino y rabanitos), se cortan y se van colocando en los boles correspondientes.
Una vez el mijo esté listo, se incorporan dos cucharadas soperas de mijo en cada bol. Se salpimenta, se añaden las semillas (lino y sésamo), se ralla la cúrcuma, el gengibre y se rocía con un buen chorrito de limón y de aceite de oliva.
¡Ahora solamente tenemos que sentarnos en una bonita mesa y a degustar!
¡Seguid disfrutando del otoño!
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