Dicen que en la vida la felicidad consiste en pequeños momentos de consciencia. En mi caso, cada día intento buscar no sólo lo positivo, sino lo hermoso. Sí, puede parecer un poco extraño, pero es un hábito sencillo que aporta bienestar y felicidad. Por ejemplo: un paseo por la ciudad en un día de nieve puedes encontrar algo tan hermoso como el momento del deshielo, donde las gotas asoman con su cántico por todos lados. Es justo ahí, donde reside la belleza. Y, lo mejor de todo, es que no cuesta nada! Salvo un poco de atención y búsqueda consciente.
*Os dejo la foto que hice en ese momento para plasmar la belleza de una simple gota. Espero que os guste...
Y para plasmar más belleza, pero en nuestros estómagos, nada mejor que un buen postre dulzón y natural (esta receta la hago desde siempre. La conocí hace muchos años en un programa del cocinero Karlos Arguiñano y la adapté añadiendo mis frutos secos preferidos- pasas, almendras...).
¡Seguro que os va a gustar!
INGREDIENTES (2PERSONAS):
1 naranja
1 puñado de nueces
1 pizca de canela (optativo, pues a mucha gente no le suele gusta la canela con naranja. Personalmente, me encanta!)
1 cucharadita de miel, sirope de agave o estevia (a elegir)
1 puñado de pasas o almendras picadidas
Se pela la naranja y se corta a discos. En un plato colocamos la naranja, añadimos las pasas, las nueces, la canela y la miel.
Rápido y listo para degustar.
*Podéis añadir desde almendras, piñones, semillas molidas -de chía, sésamo, lino- o los frutos secos que más os gusten! *Nosotros lo solemos comer en los desayunos, meriendas o postres. Y, siempre que podemos, elaborado con mis queridas naranjas Valencianas y nueces de Cuenca. Las dos tierras que llevo en mi sangre).
❤Feliz San Valentín a todos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario